“La poesía se escribe con palabras y palpitaciones del corazón; no sólo con palabras”, señaló Corcuera. “El poema se parece a uno mismo, es un ser vivo con glándulas y funciones”. “Mi poesía es un conjunto de fabulas que confirman una sola fábula”.
“He trabajado con piedras preciosas y también con guijarros”, dijo Arturo Corcuera en otro momento. En la poesía del peruano hay amor humor, nostalgia, oda y alegría. “El poeta se acaba cuando el niño muere”, añadió, para finalizar diciendo que “ningún tema está vedado para la poesía. La poesía es un fuego; un hermoso fuego de pañabras”.
Arturo Corcuera (Perú, 1935) es autor entre otras obras de Noé delirante ((1963), Primavera triunfante (1964), Las Sirenas y las estaciones (1976), Poesía de clase (1968), La Gran jugada o crónica deportiva que trata de Teófilo Cubillas y el Alianza Lima (1979), Puente de los suspiros (1982), Corea Monte de diamante (1984), Fábulas /cuentos y adivinanzas, Los amantes (1978), Prosa de juglar (1992), Canto y gemido de la Tierra (1998), Puerto de la memoria (2001), Sonetos del viejo amador (2001), Parajuegos (2002), A bordo del arca. y Tarzan e il Paradiso perduto. Antología Poetica.