23MAR23 - MADRID.- Si no estás demasiado familiarizado con la industria y sus posibilidades, probablemente no conocerás muchos de los detalles relacionados con uno de los materiales importantísimos para el sector. Estamos hablando del acero, al que vamos a referirnos en las siguientes líneas.
La idea es explicar a quienes no son expertos en el sector qué son los aceros, qué tipos de ellos hay y cuáles son las características que los diferencian. Eventualmente, se puede cometer el error de confundir los aceros especiales con otros, y por ello se torna importante poder distinguirlos.
Para saber más al respecto, es indispensable recurrir a quienes más conocen del potencial de este material por trabajar con él a diario. Aceroa es un proveedor de aceros especiales en España y Portugalque solucionará todas tus necesidades asociadas a estos productos.
Entonces, ¿qué es el acero?
El acero es una aleación de hierro que se complementa con una cantidad variable de carbono, entre un 0,03% y un 1,075% del peso total. Dependiendo del grado siempre del grado, lo primero a concluir es que acero no es lo mismo que hierro y no debemos equivocarnos y pensar que uno puede reemplazar a otro. De hecho, la diversificación entre ambos está dada por ese citado contenido de carbono.
Aunque el acero conserva algunas de las características metálicas originales del hierro en su estado puro, al sumarle carbono y otros elementos -metálicos y no metálicos-, lo que se obtiene es un resultado más resistente y más recomendable para las industrias variadas.
Dicho esto, existen numerosos tipos de acero según los elementos que se hayan incorporado a su composición y el uso que vaya a tener. Esto afectará también a sus principales propiedades: la dureza, la ductilidad, la resistencia y la maleabilidad, por mencionar cuatro de ellas.
Tratamientos a los que es sometido el acero y clasificación por composición
Los tratamientos a los que se somete el acero cambian a partir de la utilización que se ha planeado para las piezas.
Tratamientos térmicos: aplicación de calor
Tratamientos termoquímicos: uso de químicos y calor
Tratamientos superficiales: revestimientos de otros materiales
Tratamientos mecánicos: introducción en ambientes fríos y calientes
En cuanto a la clasificación, podemos destacar las siguientes alternativas:
Acero ordinario o acero al carbono: se compone únicamente de hierro y carbono
Acero especial: se compone de hierro, carbono y otros elementos, casi siempre aluminio o manganeso
Acero fundido o hierro colado (gris y nodular): se compone de hierro, carbono y otros elementos, casi siempre níquel o silicio
Acero inoxidable: se compone de hierro, carbono y otros, que lo vuelven más atractivo y resistente a la corrosión y la oxidación
Acero rápido: se compone de hierro, carbono y otros elementos, casi siempre tungsteno
En resumen, el acero es un material absolutamente versátil, sin el cual sería imposible entender buena parte de los proyectos industriales actuales. Está expuesto a múltiples tratamientos y se obtienen resultados muy fáciles de adaptar a las aplicaciones que correspondan.
(CN-04)