Bolivia tendrá antes de fin de año una "ley de deslinde jurisdiccional" que definirá y delimitará las funciones y competencias de la justicia indígena, en cuyo nombre se producen frecuentes linchamientos, anunció hoy la viceministra boliviana del ramo, Isabel Ortega.
Al inaugurar en La Paz unas jornadas sobre "Administraciones de justicia indígena en los pueblos de América", Ortega dijo que espera que hoy entre al Congreso el anteproyecto de ley, consensuado con las comunidades originarias, y que se pueda aprobar y promulgar antes de fin de año.
"La justicia indígena originaria no mata, sino que respeta los derechos, defiende sus derechos. Sobre eso estamos tipificando para que, sobre todo, no haya linchamientos", aseguró la viceministra.
La justicia indígena o comunitaria, nunca escrita ni homologada, ha sido criticada porque en su nombre "ayllus guerreros" (clanes indígenas) del departamento de Potosí (suroeste) secuestraron, torturaron y lincharon en mayo pasado a cuatro policías, tras acusarlos de cometer delitos en esa zona.
La ONU ha expresado su preocupación por el "progresivo aumento" de linchamientos en Bolivia, al menos 30 entre 2009 y los primeros meses de 2010, sin contar 77 intentos frustrados, y expresó su deseo de que la justicia indígena respete los derechos humanos.
Según Ortega, la oposición boliviana "tergiversa" el significado de la justicia indígena, por lo que instó a "agilizar" su aprobación para que se demuestre que es "reparadora y hace conciliar".
Las jornadas sobre la justicia indígena en América seguirán hasta mañana con ponencias de representantes de Bolivia, Colombia, Ecuador, España, Panamá, Perú, México y Venezuela.