La nueva Constitución boliviana reconoce a los pueblos originarios del paÃs (Foto: Nelson Vilca)
OPINIÓN
Miércoles 22 de octubre de 2014
En Bolivia se re fundará la democracia, introduciendo derechos negados por gobiernos excluyentes. Propuesta nueva de Constitución Política sometida a referéndum nacional que desempeñará un papel fundamental en las campañas populares contra la globalización capitalista-neoliberal y al intervencionismo estadounidense-europeo; modificando la Carta Magna, que define el ingreso de Bolivia a la era de un_Estado plurinacional, comunitario indígena y con autonomías.
Después de un imperioso tira y afloje en ocho escenarios de diálogo fracasados, el gobierno boliviano y los parlamentarios de la oposición cerraron un largo proceso de conflictos nacionales, aprobándose por fin una Ley de convocatoria que somete a referéndum nacional el próximo 25 de enero, a la nueva propuesta de Constitución Política del Estado boliviano con previa incorporación de más de un centenar de reformas al proyecto de una nueva y anterior propuesta. Grandes conflictos que tomaron decisiones ajusticiadas llevando a la cárcel a más de veinte personas entre ellos el ex-prefecto de Pando �Leopoldo Fernández� por la muerte y desaparición de centenares de personas. (Pando una de cinco ciudades de fuerte oposición al gobierno, que centra su atención sólo en el cono urbano).
La Corte Nacional Electoral, también en noviembre aprobó una Resolución para la difusión de propaganda electoral y de resultados de encuestas para el Referéndum Nacional Constituyente. En proyecto nuevo establece cinco niveles de gobierno: central, departamental, regional, municipal e indígenas basada en territorios ancestrales. Se reconocen cuatro autonomías: departamental, municipal, regional e indígena. Todos ellos entrarán en vigencia una vez que el texto constitucional sea aprobado o no, en enero de 2009. En competencias de Gobierno, vigila el sistema financiero, política monetaria, administración del patrimonio del Estado, políticas generales en administración de la tierra, territorio, recursos naturales no renovables-renovables y por sobre todo en el de los hidrocarburos.
Desde un_Estado plurinacional, reconoce 36 nacionalidades indígenas e idiomas propios, con derechos oficiales en la misma condición del castellano. Gobierno central y gobiernos autonómicos deberán manejar dos idiomas indígena y castellano. El proyecto nuevo define, la segunda vuelta electoral y la reelección presidencial y vicepresidencial continua, por una única oportunidad. Declara a Bolivia como un Estado pacifista, rechaza la guerra como instrumento de solución y prohíbe la instalación de bases militares extranjeras en su territorio. Define a la coca como una hoja ancestral-cultural y milenaria. Bolivianos/as tienen derecho al acceso de una vivienda, salud, agua potable y alcantarillado, los dos últimos considerados en los derechos humanos. No se renuncia a la salida marítima.
Sobre la propuesta constituyente, Rafael Bautista advierte: “El actual gobierno boliviano sólo ha estado cumpliendo lo que gobiernos anteriores prometieron y que nunca tuvieron la voluntad de realizar. Porque cumplir significa revolver la mugre y es mejor no tocar la mugre, porque así se destapa todo. Por eso, la oligarquía ofrece todo, porque así se hace política: tapa bocas con promesas que se lleva el viento. Y con él, las riquezas. El pecado consistía en cumplir las promesas. Es lo que la oligarquía boliviana beneficiada, después de las transnacionales en el periodo neoliberal, no le perdona a Evo Morales”. Y que a pesar de ello el próximo 25 de enero, el pueblo una vez más tendrá la razón a pesar de que una oposición fracturada estas semanas está en el intento de reactivarse.
El investigador James D. Cockcroft, cita a Evo Morales en la ONU, por el proyecto constitucional: ''apoya un nuevo pacto humano con toda la humanidad y con la Pachamama (madre naturaleza/tierra) viene con la voz del corazón de los Andes, desde las entrañas amazónicas del sur y para todo el mundo''. Portavoces de pueblos indígenas en Latinoamérica son conscientes de la diferencia entre sus cosmovisiones y las de Europa y Estados Unidos, son parte de los actuales conflictos de clase e ideológicos que se deben resolver para lograr la paz mundial, desde y con un equilibrio ecológico totalmente saqueado.
Deduciendo, conflicto que llevó a la crisis mundial por el excesivo gasto inútil de armas de fuego. No existió en países que ahora se alzan una sincronía humana y de pensar y de actuar para con la gente del pueblo, porque siempre han sido sometidos a ideas, políticas, proyectos de vida desde una visión de otros mundos y personas de un mundo capitalista, ahora estampado en una profunda crisis. Acaso, ¿Los últimos serán primeros? “Volveremos y seremos millones” (Tupaj Katary decía al morir descuartizado por españoles). Una nación plural implica re fundar el Estado. A los ojos de los pueblos indígenas el viejo Estado era colonial, formado por individuos selectos que defendía libertades individuales sólo para elites. Y no a las mayorías como los quechuas, aymaras, guaraníes, shuar, sirionos y otros. Hoy todos ellos por fin tienen voz y las élites temen de sus reclamos de cientos de años, ahora hechos en su mismo idioma.