En un accidentado viaje a Antofagasta, el avión de un charter que transportaba a los jugadores de Universidad de Chile y Unión Española debió regresar a Pudahuel, cuando en pleno vuelo comenzó a incendiarse una turbina. Posteriormente debieron esperar alrededor de 9 horas para volver a emprender el viaje, en dos grupos distintos en vuelos comerciales.